Los lechos minerales para mascotas (LMP) surgen directamente de la necesidad de proporcionar a nuestras mascotas un entorno higiénico y limpio dentro del hogar para «responder a la llamada de la naturaleza». Podemos encontrar varios tipos de lechos en función de su composición y características, pero los lechos minerales , concretamente los basados enarcillas naturales , sepiolita, atapulgita y moler ) son mayoritarios. Este hecho no es casual, ya que gracias a su estructura y composición natural, pueden absorber gran cantidad de líquido y controlar muy bien los malos olores. Además, poseen cavidades específicas en su estructura capaces de atrapar las moléculas causantes del mal olor, que no se encuentran en otro tipo de materiales.
Los lechos minerales para mascotas (LMP) se fabrican a partir de minerales arcillosos naturales. Los ejemplos más comunes son la bentonita, la sepiolita y la atapulgita. Estos minerales se seleccionan porque tienen la excepcional propiedad natural de absorber líquidos y controlar los olores. Dependiendo del tipo de mineral, el producto puede formar grumos cuando se moja o permanecer sin aglomerar.
Todos los minerales utilizados para fabricar lechos sanitarios para mascotas también tienen otras aplicaciones y pueden encontrarse en productos cotidianos como alimentos para animales, cosméticos, productos agrícolas o incluso papel y pintura. Sabía que la bentonita y la sepiolita también pueden utilizarse para filtrar el aceite de oliva y el vino?
Los lechos sanitarios minerales son los preferidos por los hogares europeos y estadounidenses. Cada año se utiliza en Europa alrededor de un millón de toneladas de lechos sanitarios minerales.
Según el tipo de mineral, surgen soluciones naturalmente aglomerantes, en las que el líquido queda retenido en un grumo bien definido que puede retirarse con una pala, u opciones puramente no aglomerantes/absorbentes, en las que el sustrato absorbe todo el líquido posible hasta saturarse.
Estas opciones rigen directamente la rutina de mantenimiento: en los lechos aglomerantes, los grumos sólidos y de alta calidad bloquean los malos olores y permiten una limpieza diaria rápida; mientras que las opciones más clásicas, no aglomerantes, no requieren una limpieza diaria estricta, sino el cambio periódico de todo el contenido de la bandeja cuando se satura.
Por lo tanto, todas las mascotas (y sus dueños) tienen sus propias preferencias individuales a la hora de elegir un tipo de lecho para la bandeja, pero ambas soluciones gozan de gran aceptación, ya que se asemejan mucho a lo que encontrarían disponible en la naturaleza. Cumplen la misión de rascar y enterrar sus depósitos para sentirse seguros, ya que es el comportamiento que siguen instintivamente para ocultar su rastro a los depredadores. Por lo tanto, una buena absorción y control del olor no sólo son importantes para mantener la higiene en el hogar, sino también para que nuestra mascota se sienta más cómoda y segura. Una solución que aportan los lechos minerales.
¿Cómo se fabrica la MPL?
El lecho mineral para mascotas (MPL) es un producto natural extraído de minas locales y sometido a un procesamiento físico mínimo. Tras una etapa inicial de aireación, secado al sol y, si es necesario, secado industrial para eliminar el exceso de humedad, el producto se somete a molienda y cribado para conseguir un tamaño granular con la granulometría adecuada para potenciar sus propiedades, antes de ser finalmente envasado. El MPL no contiene ningún elemento adicional a nivel de componente mayoritario, salvo pequeñas cantidades de aditivos para potenciar sus prestaciones, como perfumes o compuestos específicos para el control de olores.
En general, la extracción de minerales se lleva a cabo de forma sostenible para garantizar las reservas y hacer un uso óptimo de los recursos naturales.
Historia de MPL
La conducta natural de un gato es salir al jardín. Para los gatos domésticos se inventó la bandeja sanitaria, y al principio los propietarios de gatos utilizaban arena común, virutas de madera o periódicos viejos como lecho. No era muy higiénico y podía llegar a oler mal, lo que preocupaba tanto al dueño como a la mascota.
En 1948, Edward Loewe decidió utilizar arcillas absorbentes granuladas naturales que se vendían en garajes y talleres de maquinaria para limpiar los derrames y goteos de aceite en el arenero del gato. Al principio, se trataba de un producto tipo arcilla llamado atapulgita, con interesantes propiedades de absorción. Tanto a la mascota como al dueño les encantaban los gránulos absorbentes, y este fue el comienzo de MPL.
A principios de los ochenta, se descubrió la arena aglomerante para gatos hecha de bentonita. Los grumos capturaban los oloresdesagradables y se podían recoger. Una vez recogidos, la bandeja sanitaria vuelve a estar limpia y debe llenarse hasta el nivel original. En cambio, en el caso de las arenas no aglomerantes , hay que renovar toda la bandeja sanitaria una o dos veces por semana, por lo que el uso de material aglomerante resulta más económico.
En los años noventa aparecieron en el mercado los primeros productos no arcillosos. Normalmente, las arenaspara gatos no arcillosas u orgánicas (fabricadas con madera, maíz, paja, heno, piel de coco, gel de sílice, etc.) no forman grumos. Sin embargo, en los últimos años se han desarrollado procesos y aditivos especiales para obtener productos orgánicos aglomerantes.
¿Quiénes somos?
Esta iniciativa pretende informar sobre el uso, la seguridad y la sostenibilidad de los lechos minerales para mascotas. El sitio web ha sido creado conjuntamente por los productores de LMP para compartir consejos e información sobre las preguntas más frecuentes de los propietarios de mascotas curiosos y comprometidos con el medio ambiente. Toda la información aquí facilitada está respaldada por pruebas y estudios científicos. Si desea más información, póngase en contacto con secretariat@ima-europe.eu.